Cerebro y adicciones

ALUCINÓGENOS

 
El grupo de los alucinógenos es diverso hasta en su denominación. Se les identifica con términos que, en muchos casos, reflejan la postura de quien los nombra. Por ejemplo, psicodélicos significa reveladores de la mente, pero psicotomiméticos quiere decir que inducen estados parecidos a la psicosis. El término “alucinógenos” describe sus efectos característicos.

¿Qué son los alucinógenos?

  • Los principales alucinógenos se clasifican en tipo LSD y anestésicos disociativos (no se parecen a la LSD).
  • La LSD (o dietil amida del ácido lisérgico) es un compuesto sintético muy potente. La psilocibina y psilocina son menos potentes y se encuentran en los hongos alucinógenos. La mescalina está en el peyote.
  • Los efectos de los alucinógenos tipo LSD son similares e incluyen ilusiones, alucinaciones verdaderas, distorsión del tiempo y el espacio, y mezcla de estímulos sensoriales.
  • Los anestésicos disociativos son la ketamina y la fenciclidina. A dosis bajas son alucinógenos y a dosis altas, anestésicos.
  • Todos los alucinógenos liberan serotonina, directa o indirectamente, en regiones específicas del cerebro.

LSD y serotonina

  • La LSD es el prototipo de los alucinógenos conocidos como “clásicos” y que tienen una estructura química parecida a la serotonina.
  • Albert Hoffman sintetizó LSD buscando compuestos parecidos a los que se encontraban en un hongo que infectaba a los granos de centeno.
  • Produce dilatación pupilar, incremento de la presión arterial, frecuencia cardiaca y respiratoria que puede percibirse como ansiedad. También produce distorsión de la imagen corporal, mezcla de sentidos, intensificación de sensaciones y alucinaciones, entre otros efectos.
  • Las experiencias son intensas y pueden ser agradables o terroríficas. A esto último se le conoce como “mal viaje”.
  • Los efectos de la LSD se deben a que se une a receptores específicos a uno de nuestros transmisores químicos, la serotonina.
  • Los efectos dependen del entorno y de las expectativas del consumidor.

Hongos alucinógenos y psilocina

  • Los hongos del género Psilocibe producen alucinaciones a dosis no tóxicas
  • Sus efectos sobre presión arterial y frecuencia cardíaca, gastrointestinales y alucinógenos son similares a los de LSD, pero son frecuentes las experiencias con componentes autobiográficas.
  • La psilocina es el compuesto alucinógeno y se forma a partir de la psilocibina que está en los hongos.
  • Afecta a los mismos receptores que LSD, y algunos más.

Peyote y mescalina

  • El peyote es una cactácea que contiene mescalina, la sustancia activa responsable de los efectos alucinógenos.
  • La mescalina es menos potente que la LSD y la psilocina, por lo que se necesitan cantidades mayores para producir efectos similares.
  • Sus efectos son parecidos a los de LSD y hongos, pero duran muchas horas.
  • Como todos los alucinógenos clásicos, sus efectos dependen de las expectativas del sujeto y su entorno.

Ayahuasca

  • La ayahuasca es una bebida ceremonial tradicional de pueblos amazónicas hecha a base de las hojas de una planta y una liana específicas.
  • Tiene efectos estimulantes (aumento de presión arterial y de frecuencia cardiaca), gastrointestinales (náusea, vómito y diarrea) y psicoactivos (imágenes vívidas, alteración de los sentidos, estados de introspección, disolución de límites entre lo propio y lo ajeno).
  • La sustancia alucinógena activa de la ayahuasca es la DMT y está en las hojas de la bebida, pero se degrada muy rápidamente en el organismo. Por eso se combina con la liana que tiene beta-carbolinas, sustancias que evitan la degradación del DMT.
  • Estudios clínicos recientes sugieren que la DMT puede tener efectos terapéuticos a dosis bajas, controladas, en entornos clínicos y con seguimiento médico para depresión y otros trastornos, pero no para ansiedad.
  • El turismo de ayahuasca no cumple estos criterios y tiene algunos riesgos que es necesario conocer. En particular, los problemas gastrointestinales, cardiovasculares y psiquiátricos pueden agravarse.